Fuente: Cooperativa
Fecha: 13 de octubre 2021
Basada en acuerdos compensatorios que la trasnacional suscribió en Estados Unidos con víctimas de «Roundup», la organización pretende lo propio en Chile. Presentó una demanda colectiva que la Justicia ya acogió a trámite.
La Organización de Consumidores y Usuarios (ODECU) inició una demanda colectiva contra los representantes en Chile de la trasnacional Bayer, y busca que personas que desarrollaron cáncer tras ser expuestas al herbicida «Roundup» reciban una compensación de 200 millones de pesos: 100 millones por daño material y 100 millones por daño moral.
La acción legal fue declarada admisible por el 22° Juzgado Civil de Santiago y se basa en litigios internacionales contra la empresa, que ya accedió a pagar millonarias indemnizaciones en Estados Unidos.
ANTECEDENTES INTERNACIONALES
En el año 2015, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud determinó que el glifosato, que es uno de los ingredientes activos del herbicida Roundup (comercializado originalmente por Monsanto, que fue adquirida posteriormente por Bayer), era una sustancia «probablemente cancerígena» para los humanos.
Luego, en 2016, un informe conjunto de la OMS y la ONU consignó que investigaciones sugerían «alguna evidencia de una asociación positiva entre la exposición al glifosato y el riesgo de linfoma no Hodgkin».
A partir de estos dos antecedentes comenzaron a proliferar en Estados Unidos litigios individuales -y también una demanda colectiva- por el daño causado a cientos de miles de personas que estuvieron expuestas al glifosato, comercializado como Roundup por Bayer.
«Éste es un caso de repercusiones mundiales, donde la empresa Bayer, que compró a Monsanto en medio de este escándalo, ya ha reconocido que su herbicida Roundup, efectivamente, puede ser cancerígeno y decidió compensar a los miles de afectados en Estados Unidos y Europa», explica Juan Sebastián Reyes, abogado de la ODECU.
En enero de 2019 un jurado de la ciudad de San Francisco, Estados Unidos, determinó que un herbicida basado en glifosato fue «un factor sustancial» en la aparición de cáncer en Edwin Hardeman, un hombre de 70 años de edad, residente en el condado de Sonoma.
Este fallo le dio mayor fuerza a la causa de los enfermos de cáncer afectados por el Roundup, y posicionó esta temática en medio del proceso de adquisición de Monsanto por parte de Bayer. Fue así como el gigante químico-farmacéutico alemán comenzó a negociar acuerdos compensatorios con los demandantes, hasta lograr concretarlo –el 25 de junio pasado- con el 75 por ciento de los 125 mil litigios vigentes, incluyendo una demanda colectiva.
La multinacional se comprometió a pagar cerca de 11 mil millones de dólares en compensaciones, lo que significará que cada afectado recibirá cerca de cien mil dólares, equivalentes a unos 82 millones de pesos chilenos.
Tras este acuerdo compensatorio, tomó mayor fuerza también la causa de 20 enfermos de cáncer de Puerto Rico, que también habían demandado a Bayer ante tribunales locales. Otro tanto puede pasar en países donde se ha usado profusamente el Roundup, por sus características de cultivos, como en el caso de Argentina, Brasil, Australia y varias naciones de Europa y Asia.
EL CASO CHILENO
«Los afectados por el herbicida Roundup en Chile tienen los mismos derechos a justicia y compensación que quienes fueron expuestos en Estados Unidos o Europa, donde Bayer ya reconoció judicialmente su responsabilidad, como sucesora de Monsanto», dice Stefan Larenas, presidente de ODECU, al explicar los fundamentos de la demanda.
Según la organización, el glifosato es de uso masivo en los cultivos agrícolas de nuestro país -principalmente en las regiones de O’Higgins y el Maule- y la prevalencia de cáncer gástrico y de tiroides es significativamente mayor en las zonas donde ello ocurre.
Según la organización, el glifosato es de uso masivo en los cultivos agrícolas de nuestro país -principalmente en las regiones de O’Higgins y el Maule- y la prevalencia de cáncer gástrico y de tiroides es significativamente mayor en las zonas donde ello ocurre.
«Dicho daño tiene su origen en una conducta que constituye infracción a los deberes del proveedor, en el contexto de la Ley de Protección de Derechos del Consumidor chilena, de ahí la pertinencia de la presente acción en defensa del interés difuso de los consumidores», dice ODECU.
Pese a lo anterior, la autoridad agrícola y sanitaria chilena decretó la prohibición de importación del Roundup, pero no la comercialización de los stocks aún existentes en el país.
«Es impresentable que tanto el SAG como la autoridad de salud hayan autorizado la venta de los stocks disponibles, sin considerar que el herbicida es extremadamente peligroso y cancerígeno», dijo el abogado Reyes.
EN BUSCA DE VÍCTIMAS
Stefan Larenas admite que el universo de personas afectadas por el glifosato es «difuso y, probablemente, muy masivo». Por lo mismo, su organización está llevando adelante una búsqueda activa de potenciales víctimas a través de su sitio web.
«Queremos hacer un llamado a quienes tengan algún tipo de cáncer asociado a la exposición al Roundup a que se pongan en contacto con ODECU para informar con más detalles de esta acción legal», señaló el dirigente.
«Queremos hacer un llamado a quienes tengan algún tipo de cáncer asociado a la exposición al Roundup a que se pongan en contacto con ODECU para informar con más detalles de esta acción legal», señaló el dirigente.
Visitas: 267